Capital mirando al mar, la recorrí mirando vestidos de boda en Coruña, bonita, coqueta, invita al paseo, a la compra, no solo la capital, sino la provincia, sus pueblos de tradición Sada, Betanzos, Ferrol, Carballo, Vimianzo, Laxe, Arteixo.

Y es que aunque la tienes próxima, vivo en Oleiros, Santa Cruz, pueblo acogedor y bonito donde los haya, Coruña la aprecias y se hace querer porque es una ciudad donde da gusto callejear.

Con ocasión de mirar vestidos de boda aprendí a valorar la belleza de Coruña y sus pueblos porque por aquello de mirar en más sitios, visitamos pequeños pueblos donde se mantiene la tradición de la modista de novias.

Y es que la compra con tranquilidad, paseando, asesorándose, tiene su encanto.

Talleres de costura en  Coruña, Betanzos y Narón

Con ocasión de esta necesidad de un vestido de madrina para mi madre y uno de invitada para mi, tuve la oportunidad de conocer talleres de costura en Coruña, Betanzos y Narón.

He de decir que el encanto de la costura artesana, con diseño y estilo, se descubre en cada uno de esos talleres.

Confección a medida, personalizada, como antaño, dirigida por una modista de novias o estilista de moda, como se les llama ahora.

El placer de participar en el diseño aportando tu idea, tu gusto y presupuesto ayudará a la modista de novias a conseguir ese modelo exclusivo y único, o ese tocado para madrina de boda o ese vestido para la hermana de la novia.

Te sientes partícipe del modelo que encargas, te sientes cómoda y va a tu gusto y medida. Realmente, el valorar la artesanía, la confección a medida, el llevar un modelo de diseño y único, es algo que hay que valorar, porque vale la pena.

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Y vale la pena y así lo entienden sobretodo las madrinas de boda que no perdonan un modelo igual o similar.

Un voto a favor de la costura a medida, la costura de diseño, los tocados para madrina exclusivos.

Un voto a la creatividad y el diseño que, entiendo, da satisfacciones y te hace sentirte segura, ya no como novia o madrina de boda, sino también como mujer.