Niñas juntas, Inma y yo. El destino nos llevó por caminos distintos. Ella a A Coruña, una artista de renombre y yo a Narón, al lado de Ferrol, como diseñadora de moda en mi tienda de novias y taller de costura y confección a medida.

Aunque apenas nos separaba unos kilómetros, siempre tuvimos una relación en la distancia, para mi era una amiga especial, era Inma, de A Coruña y, cuando iba allí, tenía la esperanza de verla, de encontrarla, pero nunca nos encontramos.

Hace un par de años, de sorpresa, me visitó, sin avisar en Narón, en el taller de costura; nos emocionamos, recordamos viejos tiempos y me lo anunció: me caso, quiero ser una novia especial y me caso en A Coruña y quiero que tú me diseñes el vestido.

Vestido de novia de diseño y a medida.

Me dejó hacer, y le hice un vestido de novia de diseño y a medida, por sorpresa, en mi taller de costura; quería que fuera una novia especial y que llevara un vestido exclusivo y especial, como era ella, una amiga especial, mi amiga de A Coruña.

Horas en el taller, me arriesgué, sin tomar medidas; no me fallará mi ojo, pensé y, cuando me llamaba para volver, para ultimar y tomar medidas, le daba largas, que había tiempo.

Un día la invité a venir al taller con la disculpa de comentar el vestido, vino y yo, con ayuda de las chicas del taller había preparado en el probador de la tienda de novias un maniquí con su vestido de novia, un vestido de novia elegante, de diseño y a medida, un vestido especial y para una novia especial. Con una disculpa, la llevé al probador, en penumbra, encendí la luz y se lo dije: Inma, un vestido especial para una novia especial y amiga única; se emocionó, lloró y en cuanto se calmó, le pedí se lo probara, volvió a llorar y tuvo que quitárselo para evitar que el rimmel corriera sobre su cara y llegara al vestido. Le sentaba como un guante. Fue mi regalo de boda, un vestido de novia de diseño y especial, no entraré en detalles, para una amiga de A Coruña y muy especial.

Despedida de soltera en Ordes.

Pero antes de su boda, contacté con la pandilla de amigas de la juventud y preparamos la despedida de soltera en Ordes, para Inma, una novia especial y con una despedida especial.

Fue espectacular, no faltó ninguna y nos inclinamos por Ordes porque teníamos amigas comunes allí y en Carballo, donde varias de ellas había formado una cooperativa de trabajo para el sector textil; lo pasamos bien, nos divertimos y le hicimos un regalo de boda muy especial: cuatro de las amigas con el correspondiente vestido de dama de honor para su boda. Fue el regalo de todas y que hicimos en la cooperativa textil de Carballo. Era para una amiga especial de A Coruña y era su día, teníamos que hacerlo especial por unas circunstancias un tanto tristes que Inma acababa de pasar y que le obligarían, después de la boda, a trasladarse a Santiago de Compostela por motivos profesionales.