Modista de novias y Santa Lucía.
Las modistas, modista de novias que quedan ahora tienen como patrona a Santa Lucía. Santa Lucía es, además patrona de sastres, tienen su derecho a estar equiparados e invidentes o ciegos.
Las modistas en sus largas jornadas de trabajo solían compaginar su trabajo en casa con esta tarea de costura a medida. Eran muy pocas las mujeres que trabajaban fuera de casa, ya fuera de modistas u otro trabajo femenino, que así se conceptuaban entonces, como trabajo femenino.
Mi abuela cosía para novias de Betanzos y novias de Coruña que se desplazaban a su casa y me contó la historia.
El 13 de diciembre, las modistas, tenían el día libre, salían, paseaban y bailaban. Era su día, el día de las modistas o, como las llamaban entonces, de las modistillas, pues eran jóvenes la mayoría.
Lucía que fue santificada y era una chica que repartió la fortuna que tenía entre gente necesitada porque imploró la curación de una enfermedad que tenía su madre, curación que se produjo.
Lucía cogió novio pero resultó que era pagano y se negó a casarse con él por ese motivo, perseveró en la fe como perseveran las modistas en su trabajo.
Fue condenada a morir quemada, eran tiempos de los romanos y se negó a moverse mientras no le fue administrada la comunión. Murió y fueron muchas clientas para las que había cosido, novias, sobretodo a su entierro.
Hoy, las modistas han cambiado y aquella modista de antaño que trabajaba en su casa durante horas, ha desaparecido y perduran los talleres de costura.
Costura a medida, normalmente, habiendo quedado el reducido el trabajo de las mismas a modista de novias, pues el vestir diario no se encarga ya a una modista.
En Galicia y todos sus pueblos, A Coruña, Betanzos, Carballo, Ferrol, Narón y muchos otros proliferaban las modistas, tanto es así que fuera de la labor de ayudar en la casa familiar, modista era de los pocos oficios femeninos de entonces.
Como decíamos modista de novias es el reducto laboral que queda a las modistas en Galicia en forma de pequeños talleres.